¿Qué es el trabajo?

La pandemia puso en evidencia que la realidad del trabajo puede cambiar sin generar grandes afectaciones en la efectividad y resultados, promoviendo la flexibilidad, el home office y haciendo foco en objetivos a cumplir más que en la permanencia horaria en el lugar donde trabajamos.

Del mismo modo, distinguió claramente las ventajas de que las personas puedan compartir los espacios de trabajo, respecto de generar la identidad, valores, y visión de comunidad de labor. Ese entramado de relaciones, con pedidos, ofertas y promesas, hechas cara a cara y con tiempos de entrega y calidad pautadas, se facilita cuando se convive en un espacio en común.

No existen recetas taxativamente aplicables a múltiples entornos laborales. Cada organización humana reviste características particulares, por lo que las mejorar a proponer, los sistemas a aplicar, dependerán de esas culturas intrínsecas y desarrolladas con el tiempo.

No es lo mismo una empresa fabril, que un comercio, un servicio o una empresa de desarrollo de software. En cada una de ellas existe la posibilidad de revisión de la organización laboral, pero dentro de las condiciones específicas de cada actividad.

Abandonar la visión conservadora que arrastramos desde Taylor a esta parte es todo un desafío que tienen que plantearse las organizaciones que tengan pretensiones de crecimiento y desarrollo sobre la base de su capital relacional y humano.

La respuesta a la pregunta que titula a esta humilde pretensión de espacio reflexivo, era sin lugar a dudas mucha más sencilla unas décadas atrás, cuando las personas trabajaban por una paga, dentro de un horario acotado, cumpliendo tareas específicas, sobre los cuales se verificaba su real eficacia.

Responder acerca de qué es el trabajo en la coyuntura actual, resulta mucho más complejo, de difícil descripción y dependiendo de a que rama de actividad involucre. Salvo desde el punto de vista legal, donde se fijan claramente las pautas de la relación laboral, dentro de una realidad que existía varias décadas atrás, el resto de matices que se conjugan en el día a día y que hacen una gran parte de la definición de la labor, dependen en gran medida de la cultura organizacional, inmersa a su vez dentro de sistemas dinámicos y cambiantes.

La respuesta acerca de qué será del trabajo en el futuro, encierra varios grados más de incertidumbre, porque el desarrollo de la tecnología avanza a una velocidad mucho más rápida que lo que los sistemas laborales pueden absorber, generando más brechas entre el trabajo y los trabajadores, tensionando la cuerda para el lado de una desocupación estructural.

Más allá de todo lo expuesto, la realidad actual implica que la persona que ocupa una posición laboral, no sólo lo hace por su idoneidad y capacidad de efectuar las tareas que se requieren cubrir, sino por una concordancia entre otras habilidades blandas que la empresa necesita armonizar dentro de su cultura de trabajo. Asimismo, la permanencia de la misma en esa organización laboral, se debe a otros aspectos que la empresa debe entregar además del salario que recibe como retribución.

En esa matriz de múltiples entradas donde aparecen por un lado las cuestiones que el empleado valora del trabajo, y por el otro costado lo que el empleador requiere de sus empleados, enmarcada dentro de la red de relaciones humanas entre empleados y empleadores, radican las posibilidades de emprender un camino con altibajos y tensiones, que podrá derivar en un resultado exitoso, cuando ambas entradas de la matriz sean atendidas y respetadas, la mayor parte del tiempo.

Las encuestas llevadas a cabo a empleados de distintas partes del mundo, muestran los siguientes puntos comunes dentro de la escala superior de valoración.

Salario competitivo

El salario es siempre un factor clave en el reclutamiento y retención de empleados. Las empresas que pagan salarios más altos que el promedio tienden a atraer (y mantener) a los empleados de más calidad o productividad. Si bien el salario no lo es todo, influye en gran medida en la percepción de un empleado de su propio valor dentro de la organización. La única manera de compensar los bajos salarios es proporcionar un entorno de trabajo excepcional con oportunidades para el desarrollo profesional.

Beneficios sociales

Los empleados colocan una buena percepción de valor en un paquete de beneficios sociales. Los beneficios que los empleados consideran deseables pueden incluir muchas opciones diferentes, que incluyen seguro médico, seguro dental, reembolso de matrículas de formación relacionada con el puesto, vacaciones pagadas y disfrutadas, subsidios de vivienda, compensación por viaje, cursos de capacitación, gastos de instalaciones deportivas, guardería para hijos, etc.

Horario flexible

Tener un buen equilibrio entre trabajo y la vida privada es siempre una ventaja para los trabajadores, por lo que tienden a valorar la posibilidad de tener horarios flexibles. Los empleados se decantan por los trabajos donde pueden tener horarios que se ajusten a su ritmo de vida, y este dependerá de su edad y de las cargas familiares que tenga.

La conciliación de la vida laboral y familiar es cada vez un factor más determinante en la elección de un empleo, por lo que es un factor fundamental que cada vez más empresas incluyen en las características de sus ofertas de empleo.

También se aprecia la capacidad de trabajar desde casa, ya sea durante las horas normales de trabajo o para finalizar proyectos que no se pudieron completar en la oficina.

Un horario flexible puede ser particularmente valioso para aquellos empleados con niños, mascotas u otros compromisos familiares.

Desarrollo profesional

En general, a los empleados les gusta saber que hay un camino que les permitirá ascender en la empresa en la que trabajan, o cuando menos una mejora en su desarrollo profesional. Los empleadores que ofrecen oportunidades de desarrollo tendrán una tasa más alta de retención de empleados que aquellos que no lo hacen.

La conciliación de la vida laboral y familiar es cada vez un factor más determinante en la elección de un empleo por eso, cada vez más empresas lo incluyen en las características de sus ofertas laborales

Reconocimiento profesional

Las encuestas muestran que es bueno ser reconocido por sus contribuciones en el trabajo, ya sea que se trate de un elogio verbal, promociones, bonificaciones u otros beneficios. Incluso las organizaciones que no pueden pagar costosos programas de beneficios sociales pueden instruir al equipo de RRRH para que avise a los empleados cuándo les va bien. Un programa del empleado del mes es solo un ejemplo de una forma de coste cero de reconocimiento de los empleados, o que se reconozca públicamente las contribuciones o mejoras aportadas por los trabajadores a la organización, en materia de Seguridad, rentabilidad, reducción de pérdidas de material, limpieza, etc.

Gestión eficaz

Las organizaciones con fuerte liderazgo y visión pueden seducir y conservar a trabajadores de calidad. Como mínimo, el equipo de gestión debe participar en el establecimiento de objetivos, hacer cumplir los estándares de desempeño y comportamiento de la empresa y reconocer las contribuciones de los diferentes miembros del equipo.

Buen ambiente de equipos

Un buen equipo es fundamental para el éxito de una empresa, por lo que los compañeros de trabajo son muy importantes para la percepción de un empleado sobre su trabajo. Si el equipo no funciona, puede causar grandes problemas a largo plazo, lo que lleva a niveles de rotación de empleados superiores a lo normal. Las gerencias tienen que estar muy atentas para corregir el comportamiento problemático antes de que se generalice en todo el equipo. No sólo consiste en escoger a los mejores, sino a los que mejor forman el equipo.

Buen ambiente laboral

Un ambiente de trabajo positivo incluye muchos factores, y las empresas necesitan revisar esto con mucha atención. Las organizaciones que no proporcionan un ambiente de trabajo de calidad tendrán que lidiar con un mayor número de empleados que entreguen sus renuncias para buscar empleo con aquellos que lo hacen.

Trabajo interesante

Que el contenido laboral sea interesante es esencial. Los propósitos tienen que ser compartidos, visionados y seguidos en conjunto. La innovación y la posibilidad de trabajar en proyectos, fuera de las rutinas hace más interesantes los empleos, generando esa sensación de querer pertenecer con un gran compromiso y responsabilidad.

Vacaciones

Disponer de mayor cantidad de días de vacaciones es un plus para muchos empleados, que quieren vivir una vida más allá del trabajo, persiguiendo otros intereses y propósitos que tengan que ver con el sentido de plenitud y búsqueda de bienestar y disfrute.

Del mismo modo, las encuestas hechas a las empresas y organizaciones empleadoras nos muestran cuáles son los aspectos o habilidades más valorados a la hora de contratar un trabajador, incluso por encima de la idoneidad manifiesta para ocupar una posición.

Flexibilidad y resolución de problemas

Esta habilidad permite la adaptación con rapidez a diferentes situaciones, asumir otros roles y desempeñar funciones diferentes a las asignadas en un inicio. En un mundo empresarial cambiante e incierto, las compañías necesitan empleados flexibles, capaces de trabajar en un entorno en el que surgen imprevistos a los que hay que adaptarse rápidamente para seguir avanzando.

Creatividad e Innovación

Una de las habilidades más valoradas actualmente depende de la capacidad a la hora de crear nuevas ideas y formas de realizar un trabajo. Es probable que una persona creativa, se mantenga más tiempo con una mente abierta y receptiva hacia el entorno, con la intención de captar e imaginar nuevas perspectivas de hacer las cosas y de participar en el desarrollo de nuevos productos o servicios.

Comunicación eficaz

Es una capacidad desarrollada y aprendida que permite expresar ideas, opiniones y transmitir información de forma clara, fluida, eficaz y creíble, tanto entre compañeros y colaboradores como entre subordinados y superiores. Si la comunicación de una empleado es de buen nivel, por lo general viene acompañada de facilidad para hablar en público y también para escuchar a los demás, de formas activa y empática.

Trabajo en equipo

La disposición para trabajar en equipo y para colaborar con otros compañeros, departamentos y empresas es un requisito indispensable. La idea es compartir, colaborar, participar y ayudar a los demás con el fin de conseguir un objetivo común en la organización.

Organización

Se trata de gestionar el tiempo y planificar el día a día con disciplina, constancia y consciencia de cuáles son tus límites y alcances. La clave es discernir lo urgente o prioritario de lo que es accesorio o menos relevante. Requiere ser acompañada por la facilidad para confiar y saber delegar tareas a otros miembros de tu equipo.

Gestión del estrés

Se relaciona con la capacidad de gestionar las cargas de trabajo de la empresa y las exigencias de tus superiores, colaboradores y pares con serenidad. Se valora disponer de una elevada tolerancia al estrés y a la frustración y una alta capacidad de concentración para realizar las tareas asignadas planificando y organizando el tiempo y priorizando las diferentes demandas.

Inteligencia Emocional

Está formada por un conjunto de habilidades que nos permite tanto expresar las emociones de forma asertiva como entender las de los demás, desde un punto de vista empático. La práctica de la inteligencia emocional es una gran aliada a la hora de mejorar las relaciones interpersonales en diferentes situaciones y contextos.

Toma de decisiones

Se valora la capacidad de iniciativa, la proactividad y ser resolutivo a la hora de tomar decisiones con agilidad y eficacia. Para ello, se requiere ser capaz de identificar la dificultad o situación a resolver, analizar sus causas y efectos, valorar las alternativas y tomar una decisión.

Manejo de las nuevas tecnologías

En un mundo hiper conectado, un buen conocimiento de las tecnologías es básico para cualquier puesto de trabajo. Por consiguiente, es importante que sepamos manejar las diferentes redes sociales, los programas básicos de oficina e incluso aquellos tipos de software más específicos relacionados con el sector en el que trabajas.

Atención al cliente

Se necesita desarrollar una actitud permanente de entender las necesidades del cliente desde cualquier ámbito de la organización. El cliente no sólo es el usuario de tus productos o servicios, sino que puede ser cualquier otro miembro de la organización con el que colabores, proveedores externos, etc.

Expectativas de empleadores y expectativas de empleados, pueden sintonizarse de manera virtuosa, si la red de relaciones que compone una empresa, se articula en torno de valores comunes dentro de un trabajo sobre objetivos consensuados, dinámicos y flexibles.

Como se puede apreciar, responder a la pregunta sobre ¿Qué es el trabajo? puede resultar en un sinsentido sino tenemos en cuenta varios de los aspectos mencionados a lo largo de nuestro análisis.

Cuando en una organización existe la mayor concordancia y coherencia en cómo responden esa pregunta los empleados y los empleadores, el ámbito de trabajo crecerá y la organización tendrá más posibilidades de generar valor y progreso sostenible.

Si ya tienes tu respuesta, te pido que la compartas con otro para enriquecerla y hacerla menos personal.

El desafío es responder esa pregunta no sólo pensando en el hoy, sino más bien el mañana.

1 comentario en “¿Qué es el trabajo?”

  1. Excelentes reflexiones Marcelo. Hace 11 años trabajo desde mi casa, Home Office, y requiere disciplina y flexibilidad. Antes tardaba 30 min para ir hasta el trabajo y 30 para volver. Eso significa una hora más para aprovechar en familia, o capacitarte, o hacer deporte, etc.

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