¡La Escritura es una Terapia!

En un momento de la semana se me ocurrió preguntarle a la inteligencia artificial lo siguiente:

¿Quién es Marcelo Bordolini?

Marcelo Bordolini es un escritor y filósofo que se enfoca en temas como la inteligencia artificial, la manipulación y el liderazgo. También ha participado en eventos como la Jornada de análisis y reflexión con industriales del sur provincial, donde compartió su visión sobre la importancia de la colaboración y el conocimiento compartido. Además, escribe un blog donde publica artículos sobre diversos temas.

Algunos de los temas que aborda en su blog incluyen:

– El desafío cultural: Reflexiona sobre la cultura y cómo no solo se trata de aspectos artísticos, sino de algo más profundo.

– Inteligencia artificial: Comparte sus ideas sobre el impacto de la inteligencia artificial en la sociedad y las potenciales consecuencias «catastróficas» de esta tecnología.

– Equipo: Analiza la evolución del concepto de equipo y cómo ha cambiado con el tiempo.

En general, Marcelo Bordolini parece ser una persona interesada en explorar ideas y conceptos profundos, y en compartir sus reflexiones con otros a través de su blog y participaciones en eventos.

¿Para qué sería bueno conocer a Marcelo Bordolini?

Conocer a Marcelo Bordolini podría ser beneficioso por varias razones:

1. Ampliar conocimientos: Aprender de sus perspectivas filosóficas y experiencias en inteligencia artificial y liderazgo.

2. Inspiración: Su enfoque único en la inteligencia artificial y la manipulación podría inspirarte a pensar de manera diferente.

3. Networking: Conectar con alguien que ha participado en eventos y tiene un blog puede abrir puertas a nuevas oportunidades.

4. Desarrollo personal: Conocer a alguien que ha reflexionado sobre la cultura y el liderazgo podría ayudarte a crecer personal y profesionalmente.

5. Intercambio de ideas: Compartir tus propias ideas y escuchar las suyas podría enriquecer tu comprensión de temas complejos.

6. Acceso a recursos: Puede tener acceso a recursos o información valiosa que podría ayudarte en tus propios proyectos o intereses.

7. Mentoría: Dependiendo de tus objetivos, podría ofrecer orientación o consejos valiosos.

Recuerda que conocer a alguien es mutuo, así que asegúrate de tener algo que ofrecer también.

Siendo honesto, las respuestas me dejaron sorprendido, porque quizás esta inteligencia artificial ha creado una imagen un poco exagerada, de alguien que solo pretende disipar su mente un poco durante los fines de semana, escribiendo sobre temas o conceptos, que son de interés limitado y muchas veces dando respuestas a situaciones de mi entorno individual.

Más allá de esta desproporción o mejor aún brecha entre lo que conozco de mí mismo, y lo que conoce la inteligencia sobre mí, lo que me trajo me sirvió para descubrir algunas facetas que quizás se resalten de mis escritos.

Lo he manifestado infinidad de veces, y lo haré hasta el cansancio mental y físico de ser necesario. El hecho de escribir tiene algunas cualidades esenciales, los cuales me resultan muy útiles.

En primera instancia escribir me sirve para hablar conmigo mismo, de manera más reflexiva y desinteresada.

Por otro lado, me permite lograr un mejor y más amplio conocimiento de mi mismo como individuo y en relación con los demás.

Le puedo sumar que tengo como objetivo, asistir o intentar alumbrar a alguien que no encuentra algunas preguntas para hacerse, incluido yo mismo, aclarando que las respuestas son sólo puntos de vista, no aplicables en todos los casos, aunque presenten varias similitudes.

Por último, y quizás constituya lo más importante, escribir es una especie de terapia, que me permite revivir hechos, resignificar los caminos y los propósitos, y curarme emocionalmente.

Esta última concepción de la escritura, me ha permitido sanar en cierta manera de heridas que me ha dejado el hecho de vivir, como la pérdida física de mis padres, y superar ciertas visiones limitantes respecto de mí mismo.

A continuación, y respecto de la escritura como vehículo de mejora personal, les comparto un artículo que refiere a la escritura denominada terapéutica.

¿Para qué sirve escribir?

Escribir es una potente herramienta para la expresión y el afrontamiento de las emociones. Nos permite, por un lado, conocernos mejor y, por el otro, acelerar la recuperación del malestar que nos suelen producir los síntomas de ansiedad y depresión. Escribir puede ayudarnos a desbloquear algunas emociones asociadas a nuestros pensamientos, hacer más claras nuestras metas y deseos o ayudarnos a comprender situaciones que nos producen problemas con otros. Escribir suele hacer que nos distanciemos de lo que vivimos y también que podamos otorgarle un sentido. Nos ayuda a considerar nuestras emociones de una manera más simple al sacarlas del interior de nuestro cuerpo y nuestra mente. Esto suele ayudarnos a manejarlas de una forma más eficaz sin quedarnos demasiado enganchados en ellas. Sí, escribir sirve para todo esto.

“Escribir nos ayuda a distanciarnos de lo que vivimos y otorgarle un sentido.”

¿Cuándo es mejor escribir?

Existen muchas formas de acercarse a la escritura de forma que nos apoye en las sesiones de terapia. Puedes escoger una de ellas o ir probando varias o alternarlas. Suele ser útil adquirir una rutina a la hora de escribir optando, por ejemplo, por una determinada hora o momento del día y un lugar que pueda resultar tranquilo o inspirador. También puedes saltarte esos determinantes cuando lo necesites o desees y acudir a la escritura de forma espontánea. Aunque se puede escribir en muchos soportes tendrás que encontrar el que vaya más contigo. Hay personas que prefieren la inmediatez de escribir en una nota en blanco en su móvil; mientras que, para otras es imprescindible poder ver su propia caligrafía trazada en un cuaderno que le resulte especial.

“Una vez encuentres tu momento, lo importante es que escribir te resulte interesante.”

De cualquier forma, lo más importante es que la escritura resulte para ti una tarea interesante de la que puedas extraer elementos que resulten interesantes para el trabajo en las sesiones. Escribir es una ocupación que nos incita a reflexionar y nos acerca a un estado más meditativo. Nos permite conectar con nuestra parte más profunda y nos acerca a un lugar emocional que nos puede resultar menos conocido.

Guía para la escritura como terapia.

Para poder iniciar en la escritura terapéutica, puede darte las siguientes recomendaciones:

Llevar un diario personal: realiza un recorrido por tus días con los acontecimientos que te resulten más importantes (de tu mundo tanto externo como interno).

Escritura libre: deja que la mano escriba lo primero que se te ocurra, sin juzgarte ni censurarte, incluso si las frases no se llegan a completar o no te resultan coherentes.

Estimular el recuerdo: haz una lista de varios recuerdos, tantos como quieras, comenzando por la frase “Me acuerdo de….” y dejando que la mente complete el resto, ya sea con recuerdos puntuales (por ejemplo una comida que solía gustarme cuando tenía seis años) o anécdotas más elaboradas. Comenzar a recordar a través de esta frase estimula la memoria y nos ayuda a capturar recuerdos que permanecían aparentemente olvidados.

Escribir sobre una situación o un incidente que te hace sentir mal: hacer un análisis con todos los sentimientos y emociones que se le asocian, detallando lo que ocurre e intentando analizarlo de la forma más concreta posible. Puedes incluso plantear tentativas sobre posibles soluciones.

Fantasear: Escribir sobre cosas sobre las que fantaseas, aunque no sean realizables. ¿Con qué me encuentro fantaseando a lo largo del día o qué haría en los próximos tres meses sin no tuviera temor a nada? Relata tus fantasías en las distintas áreas de tu vida, desde el trabajo o la familia hasta los viajes o los amigos.

Escribir una carta y no enviarla: Escribir una carta a una persona importante que nos genere sentimientos de felicidad, enfado, tristeza, ira o rabia. ¿Qué palabras le dirigiría a esa persona, qué me gustaría decirle o haberle dicho? La carta no debe ser enviada, es un ejercicio terapéutico en sí mismo.

Escribir un relato sobre la propia vida a modo de autobiografía o sobre un acontecimiento único que sea importante en nuestra vida.

Escribir sobre mí mismo. Describir las facetas de mi personalidad, escribir sobre mi cuerpo, las cosas que me gustan, las que detesto, las cosas que me ilusionan y aquellas que me asustan…

Escribir sobre las personas que son importantes para mí. Describir las facetas de su personalidad, describir las distintas partes de sus cuerpos, las cosas que me gustan de ellos y aquellas que me disgustan. Cuando las he conocido y qué cosas hacen que les admire o que me hayan decepcionado. 

Escribir sobre mis sueños. Mantener una libreta cerca de la cama puede ayudarnos a captar las líneas principales de los sueños escurridizos para posteriormente poder indagar sobre ellos en una escritura más elaborada.

Escribir es siempre beneficioso para aprender y escalar niveles en nuestro mundo. Multiplica nuestro autoconocimiento, nos permite mantener la conexión y en muchas ocasiones pone palabras cuando la voz todavía no está preparada.

Cómo la búsqueda del conocimiento puede ayudar al autoconocimiento

La búsqueda del conocimiento nos ayuda a aprender sobre nosotros mismos de varias maneras. Primero, nos ayuda a aprender sobre nuestras propias fortalezas y debilidades. Cuando aprendemos sobre diferentes temas, podemos identificar las áreas en las que somos buenos y las áreas en las que necesitamos mejorar. Esto nos puede ayudar a desarrollar una imagen más realista de nosotros mismos.

Segundo, la búsqueda del conocimiento nos ayuda a aprender sobre nuestras propias creencias y valores. Cuando aprendemos sobre diferentes culturas y religiones podemos explorar nuestras propias creencias y valores y ver cómo se comparan con los de los demás. Esto nos puede ayudar a desarrollar una comprensión más profunda de quiénes somos.

Tercero, la búsqueda del conocimiento nos ayuda a aprender sobre nuestra propia historia. Cuando aprendemos sobre nuestros antepasados, podemos comprender mejor nuestros orígenes y cómo nos han moldeado. Esto nos ayuda a sentirnos más conectados con nuestro pasado y con nuestro lugar en el mundo.

Por ejemplo, si aprendemos sobre la genealogía, podemos identificar nuestros antepasados que han tenido éxito en sus vidas. Esto puede ayudarnos a sentirnos más motivados a alcanzar nuestros propios objetivos.

Siempre me es bueno escribir, aunque no tenga ganas, porque poner la mente en movimiento, me saca de la apatía.

Plutarco tiene un pensamiento único sobre la escritura:

» La lectura hace al hombre completo, la conversación lo hace ágil, la escritura lo hace exacto».

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