Vocación !

Lo recuerdo como si estuviera pasando en estos precisos momentos.

Terminaba el secundario, en una escuela con orientación en bachillerato comercial; en el año 86, del siglo pasado, era una de las pocas que conservaba el esquema expandido de cursado en seis años. El fundamento era que los alumnos lograran un mayor nivel de madurez, previo a la elección de una carrera universitaria.

Desde mediados del último período lectivo, algunos de nosotros, no muchos, concurrían a encuentros de orientación vocacional. Una gran proporción, estaba preocupado por su futuro, acompañando la mirada de sus padres, pero tenía más o menos claro, hacia donde ir. Una mínima parte del alumnado tenía una actitud indiferente respecto de la cuestión central: que voy a seguir estudiando?

En el seno de mi familia, no hubo muchas conversaciones al respecto. Casi siempre fui un buen alumno, destacado por las buenas notas y con proyección profesional. Como contrapartida bastante indisciplinado, según los juicios de aquella época.

Lo que yo decidiera estaba bien, vale decir no tuve indicaciones o presiones para seguir, por ejemplo, la carrera de contador que era la profesión de mi papá Ramón.

Ingeniería Química para producir y hacer químicos, materiales, construir fábricas. Muy buena opción para mí. La Química más de laboratorio y de investigación no me atraía de la misma manera. Me gustaba ver en hechos lo que se mostraba con planos, diseños, cálculos de todo tipo.

Por otro lado, ferviente lector, con tendencia al pensamiento crítico y reflexivo, me gustaba la filosofía y las letras.

Por lo que hube de optar, como tantas otras veces en mi vida, esta vez siguiendo la línea de la creación material, dejando lo inmaterial algo dormido o aplacado.

Unos años atrás el bichito de la vocación volvió a picar, para volver a incursionar de manera constante y corriente sobre mi pensamiento y quehacer humano. Me entrené como coach profesional. Volví a indagar profundo en mi interior, vocacionando algo distinto.

Es en parte por esto que escribo este blog, desde hace más de un año, en esta especie de ejercicio de oxigenación de las neuronas y el corazón.

A qué viene todo este cuento?

A resaltar la importancia de la VOCACION en nuestras vidas. A diferenciarla y distinguirla del concepto de PROFESION. A veces son confluyentes, otras tantas no. No es crucial que lo sean, pero la sintonía entre ambos puede ser un gran potenciador personal.

La palabra tiene sus orígenes en la religiosidad, como una llamada o inspiración para la vida religiosa. Más tarde migró al concepto más conocido, como inclinación o interés que una persona siente en su interior para dedicarse a una determinada forma de vida o un determinado trabajo o servicio. La voz interior que nos llama para enfocarnos en algo.

Estar alineado con una visión personal, siguiendo la llamita interior que nos marca una tendencia hacia lo que nos motiva y nos gusta, es una cuestión bastante central.

La Vocación hace que podamos aceptar las equivocaciones, aprender de ellas; al mismo tiempo nos baja a tierra en el éxito personal y profesional. Es el piloto encendido, listo para prender un fuego mayor.

La llamada vocacional, no sigue una regla fija. Está más asociada a la evolución y el desarrollo humano, que a la edad biológica. Algunas personas tardan años en descubrir su genuina determinación o inclinación por algo.

Lo atractivo resulta en que las oportunidades están ahí. Existen posibilidades de cambiar el rumbo, siguiendo un norte distinto, sacando el polvo a la brújula guardada.

Quizás el más grande desafío sea el de mantener la llama encendida.

Ahora bien, de copetín les traigo el contenido de un artículo periodístico, vinculado a lo que estamos tratando hoy.

Lo escribe Jorge Tortaglione. Médico y Presidente de la Fundación Cardiológica Argentina.

La Heroica Vocación de Curar

El derrotero de la medicina está plagado de hombres y mujeres que han dado todo por otros seres, movidos por la vocación y la pasión. La mayoría de las veces, trabajando en silencio y ajenos al reconocimiento público. Muchos de ellos fueron profesores y fuente de inspiración para las siguientes generaciones de médicos. Verdaderos referentes éticos y ejemplo de valores humanos en acción.

Demostraron también que ni los embates políticos ni los contextos socioeconómicos adversos pueden frenar la voluntad de servir a los demás y hacer valiosos aportes para la ciencia. Por eso, hoy, cuando los médicos deben enfrentar una vez más recortes en ciencia, la falta de recursos en muchas de las instituciones públicas que velan por la salud y la ineludible sobrecarga laboral, es oportuno recordar el ejemplo de doce médicos que hicieron historia y merecen ser considerados “héroes argentinos”.

Bernardo Houssay, Pedro Cossio, René Favaloro, Osvaldo Raffo, Luis Agote, Cecilia Grierson, Enrique Pichón Riviere, Florencio Escardó, Salvador Mazza, Esteban Maradona, Ramón Carrillo y Arturo Illia han demostrado que la medicina debe ejercerse como un apostolado.

Algunos de ellos fueron censurados y criticados, otros fueron cesanteados de cargos y obligados a exiliarse; pero todos, pese a los obstáculos, siguieron adelante. Se pusieron el overol por el país. A juzgar por la cantidad de tareas que realizaron y los objetivos que cumplieron, parece que hubieran vivido más de una vida.

Mazza fue ninguneado y lo acusaron de pirómano, mientras que Houssay no fue reconocido ni aun cuando le entregaron el máximo galardón que puede obtener un médico: el Premio Nobel. Cossio pasó de ser separado de su cargo por antiperonista a convertirse en el cardiólogo personal de Juan Domingo Perón.

Carrillo murió en el exilio en el medio de la selva brasileña y Grierson, por el solo hecho de ser mujer, no pudo obtener un cargo docente. Maradona tuvo que exiliarse en Paraguay por oponerse al gobierno de facto.

Pichon-Rivière fue echado del Hospital Borda con el argumento de que su trabajo promovía la homosexualidad y que era comunista. En tanto que Agote recibió críticas, que se mantienen hasta el día de hoy, por dictar la ley de menores. Escardó fue echado de la Universidad de Buenos Aires luego de ser confirmado como profesor adjunto. Y a Raffo le cuestionan haber trabajado como médico forense de la Policía Bonaerense durante la última dictadura militar.

Estudié con los libros de fisiología de Houssay y semiología de Cossio; pude presenciar conferencias y recorrer salas de enfermos operados del corazón con Favaloro. Admiro la hombría de bien de Illia, el concepto social de la medicina de Carrillo, Mazza y Maradona; el esfuerzo de Grierson para insertarse en un mundo rotundamente machista, la tenacidad de Agote, el pensamiento de Pichon-Rivière, la audacia de Raffo y la capacidad de comunicar de Escardó. Son vidas increíbles, que hicieron aportes decisivos para cambiar la calidad de vida de miles de personas y que además debieron superar los escollos que les presentó la situación del país que les tocó vivir.

En este Día del Médico, vaya a estos doce héroes y a los que actualmente ponen su corazón en esta profesión, capaz de ser tan reconfortante como ingrata, mi homenaje y agradecimiento. Con la esperanza, también, de que las nuevas generaciones los mantengan vivos en su memoria a la hora de trabajar por uno de los bienes más preciados del ser humano: la salud.

Por demás interesante el contenido: La vocación de servicio a pleno.

Como era de esperar, en casi todos mis escritos, no traigo respuestas. Me inclino más bien por las preguntas.

Cómo andas de vocaciones?

Distinguís tu fuego encendido?

A quienes incluís a la hora de vocacionar?

Una sola consideración que creo útil traerte.

La era de la transformación digital, necesita de vocaciones nuevas.

Qué estamos haciendo a nivel personal y social para equilibrar y armonizar tecnología y vocación?

Hoy no encuentro un cierre , ni una frase magistral aplicable.
Por lo que si te parece, elegí la que te resulte más útil.
Por mi lado, el cerebro me dijo basta……
Es fin de semana !
A descansar se ha dicho……

1 comentario en “Vocación !”

  1. Muy Buena reflexión Marcelo, muchas gracias
    Se la pasare a mi hija que el año que viene termina su secundario….para que vea su camino y siga su llamita …

    Besos

    [firma nueva]

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