SUPERMAN A LOS 50 !

Mis cinco décadas significan un evento especial para mis hijas, fundamentalmente para la menor Lucia, cuya edad está contenida diez veces en la mía.

Hace rato que ella viene planeando qué obsequios hacerme, qué ropa singular usar para el Domingo 3 de Junio, fecha de mis cincuenta velitas.

Contiene la respiración para decir de un solo tirón:

Papá cuando te despiertes por la mañana en compañía de tu princesa, encontrarás todo este lado de la cama cubierto de cosas que te regalamos.

Y qué me vas a regalar vos?

Algo muy espectacular que representa cuando te casaste con mamá, que signifique el amor que sentían cuando se conocieron.

Aha, guau.

Y se puede saber qué es?

No papi, es totalmente sorpresa. Espera hasta el Domingo. Todo este lado lleno, te vas a acordar no?

Seguro, gracias.

Hace juego con el diamante que es mamá y con el brillante que sos vos.

Aha, bárbaro.

Se corta momentáneamente la conversación, desaparece unos instantes y vuelve con un dibujo en la mano.

Mirá lo que dibujé.

Te explico, si querés.

Superman sos vos, Mamá es Superchica, Emilia, Paula y yo somos las hijas de Superchica. Ves,  yo soy la más pequeña.

Primera sorpresa agradable: me hizo con pelo y sin lentes, eso demuestra ya mucho amor. Segundo hecho a destacar: Superman  es esbelto y estilizado.

Me pregunta sonriendo:

Te gustó?

Si por supuesto, le digo.

Repentinamente  sale corriendo como un disparo de luz, y ya en el pasillo se la escucha decir:

Me voy a seguir dibujando, OK?

Me quedo sintiendo una mezcla de felicidad, y al mismo tiempo con la gran responsabilidad de ser Superman a los 50.

Así es como nos ven nuestros hijos, y resulta muy fuerte caer en la cuenta de cómo impactamos en la vida de estas personas en formación, con el compromiso y la tarea de saber que no son inertes a lo que transmitimos, a lo que accionamos, a lo que emocionamos cerca y por ellos.

Es probable que en otro momento la imagen que les dejemos, sea absolutamente distinta, más parecida a la del Guasón, pero hoy quiero disfrutar y compartir con Ustedes que soy Superman.

Un bocallave tipo 50  me invita a mirar dentro de la habitación, y casi sin mucho esfuerzo distinguir claramente que mi familia es lo mejor de mi vida.

Los momentos más profundos de mi  existencia se vinculan a la vivencia del nacimiento de mis hijas mellizas, Paula y Emilia, y la frutilla del postre Lucía. De seguro muchos compartirán lo mismo.

Sólo que hoy necesito contarlo, de la mano de mi ángel de la guarda Eugenia.

Huelgan las preguntas, sobran las respuestas.

Hoy quiero festejar brindando por ellas, y por todas las personas con una significación especial en mi vida. Familia, Compañeros de Trabajo, Amigos, Vecinos, Maestros, todos están presentes conmigo en este salto de 50 años.

Estoy pensando en el objetivo concreto de vivir un múltiple similar de años más. Ese siglo me posicionaría cerca de mi bisabuela que vivió 101 años.

Demasiado pretencioso capaz.

Por ahora disfruto de la figura del Superheroe.

Sólo espero no me falte kriptonita.

Y si escasea que no se note…..